El Contrato de Franquicia: modelo de expansión empresarial.

El sistema de franquicias, como modelo de expansión, permite a las empresas crecer de la mano de capital y operación de terceros.

¿Qué es el contrato de franquicia?

El contrato de franquicia es un contrato de colaboración mercantil en el que una empresa, denominada franquiciador, otorga a otra, el franquiciado, el derecho a la explotación y comercialización de ciertos productos o servicios sobre una actividad comercial que el primero de ellos, respectivamente, venga desarrollando anteriormente, a cambio de una contraprestación financiera directa.

En efecto, el contrato de franquicia debe, como mínimo, contemplar lo siguiente:

  1. Cesión del uso de la marca, debidamente registrada, constituida por:
    1. Uso de una denominación o nombre comercial
    2. Uso de un rótulo común u otros derechos de propiedad intelectual o industrial
    3. Imagen corporativa entendida como la presentación uniforme de los locales o medios de transporte objeto del contrato.
  2. Transmisión de know how y conocimientos técnicos, comerciales, financieros, operativos con un saber hacer propio, sustancial y singular.
  3. La prestación continúa por el franquiciador al franquiciado de una asistencia comercial, técnica o ambas, durante la vigencia del acuerdo; todo ello sin perjuicio de las facultades de supervisión que puedan establecerse contractualmente.

¿Quién puede franquiciar un negocio?

Los requisitos para disponer de un negocio franquiciable son, principalmente: 

  • Tener un modelo de negocio completo, probado y rentable.
  • Disponer de un Know How transmisible.
  • Ser titular de una marca notoria.
  • Tener varias unidades propias en funcionamiento.
  • Capacidad de ofrecer formación inicial y continuada, y una estructura empresarial suficiente para dar la asistencia técnica. 
  • Ofrecer sinergias en el aprovisionamiento de productos y en la construcción o reforma del establecimiento.

¿Qué ventajas ofrece este modelo de crecimiento y expansión?

Para el franquiciador, la figura de la franquicia representa una forma de expansión acelerada, además de brindar una mayor rentabilidad sobre los recursos propios. Además, supone una solución a la complejidad de la gestión por motivos de dispersión y distancia, y permite una menor inversión y financiación del franquiciador.

Por otro lado, el franquiciado tiene la posibilidad de aprovecharse de un modelo de negocio probado y de éxito, servirse de los valores y ventajas de una marca conocida y beneficiarse de las acciones de marketing del franquiciador. A nivel empresarial, esto se traduce en una mayor facilidad para su apalancamiento financiero, mayores ingresos por facturación y un acceso al Know How del negocio junto a una asistencia técnica y formación continuada. En definitiva, la franquicia permite una reducción significativa de los tiempos de puesta en marcha y del riesgo del negocio.

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Autor: Pol Acosta Farré, Legal Assistant.

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